
La viñeta nos muestra la situación entre un niño y el psicólogo del colegio. Él le dice al niño que eleve la zurda, pero el niño no lo entiende lo que quiere decir y se queda parado. Al ver esto, el psicólogo le dice que el niño tiene un retraso grave y que debe de ir a clases especiales.
En primer lugar decir que nunca se le debe de decir a un niño que tiene un retraso grave, ya que este tipo de comentarios "anulan" al niño y hace que se sienta mal. Lo primero de todo es que para hacer un diagnostico, se debe se utilizar un vocabulario que el niño conozca para que así pueda responder correctamente. Y lo segundo es que un diagnóstico no se puede hacer tan a la ligera como aparece en la viñeta, ya que no basta con una sola pregunta o una sola sesión, sino que se necesita más de una sesión y un seguimiento de ese alumno y cuando ya se tenga en cuenta como reacciona ante las cosas, sus conocimientos o sentimientos, ya se podrá hacer un diagnóstico, mientras no.
Por eso tenemos debemos de evitar la primera impresión y un primer análisis de una persona, porque de esta forma nos podemos equivocar y muchas veces no hay marcha atrás por el daño que se le ha hecho a esa persona y en especial si es a un niño, ya que una persona mayor puede olvidarlo o cambiar pero un niño crece con esa impresión y actuará de forma diferente.